Que todo en el universo es energía en diferentes estados es algo que ya no se discute. Es decir, todo es energía vibrando a diferentes frecuencias.
Las personas también tenemos un sistema energético, al igual que tenemos otros sistemas: nervioso, circulatorio, endocrino, etc, aunque no lo podamos percibir a través de nuestros sentidos.
Además, todos los procesos del organismo son regulados por nuestra energía vital. Esta energía fluye a través de los meridianos o canales energéticos, y contribuye al buen funcionamiento de todos nuestros órganos y sistemas.
Cómo hacernos conscientes de nuestro sistema energético
Para poder canalizar la energía vital, lo primero es tomar conciencia de nuestro propio sistema energético.
Como ya he comentado, no lo podemos percibir a simple vista, como tampoco vemos nuestros otros sistemas. Pero eso no significa que no exista. De hecho, podemos utilizar diferentes tecnologías que nos permiten medir cómo está nuestra energía. Tanto en cuanto a la cantidad, como en cuanto al equilibrio. Y de esta manera, podemos conocer el estado de nuestra salud bioenergética.
Podemos sentir la energía
Tanto a través de meditaciones, como de técnicas energéticas (Reiki o Tensergética, por ejemplo), puedes empezar a sentir la energía.
Pero también puedes realizar ejercicios sencillos, que te permiten notar la energía en tus manos, y así hacerte consciente de ella.
Empieza a practicar con éste:
-Siéntate con la espalda recta y el mentón ligeramente inclinado hacia abajo. Los hombros y los brazos relajados. La zona del cuello, pecho, hombros, lo más suelta posible.
-Inhala profundamente, y lleva tu atención a las dos manos. Observa tu mano derecha, y siente los dedos y la palma. Dirige tu atención a la mano izquierda, y fíjate en los dedos y en la palma.
-Ahora inhala, y al exhalar pon tu atención en las dos manos, y en el espacio que hay entre ellas. Ve acercando las dos manos, poco a poco, a golpecitos, hasta que casi se junten.
-Empieza a jugar con tus manos, acerca la derecha a la izquierda, y al contrario. Luego sepáralas, poco a poco. Ve creando como una bola de energía imaginaria entre tus manos.
-Ten en cuenta que donde va tu atención, va la energía. Por eso es importante que tu atención esté siempre puesta en el espacio entre tus manos. Cuanto menos muevas la mente de la zona, más notarás la energía.
-Cuando empieces a tener sensaciones en tus manos, ve separando las manos manteniendo esa bola de energía que has creado…. Cuando acerques las manos puedes sentir la energía como sensación de calor, frio, hormigueo.
-Si no lo sientes enseguida, no te desmotives. Sigue intentándolo. Poco a poco verás como empiezas a tener sensaciones.
Más ejercicios para canalizar la energía vital
Canalizar la energía vital con la energía de los dedos
Los mudras son gestos que nos permiten canalizar la energía vital adecuadamente a través de nuestro cuerpo.
Se realizan con los dedos de las manos, uniéndolos entre sí de maneras, y con presiones muy diversas.Y se utilizan para alcanzar el equilibrio y el bienestar, físico, mental, emocional y espiritual.
Se utilizan sobre todo en meditación o yoga. Pero también se pueden emplear en otros momentos, durante 15-30 minutos, una o varias veces al día.
Estos son algunos de los mudras más conocidos:
Kubera Mudra
Muchas personas lo conocen como “la técnica de los tres dedos”, o “el mudra del aparcamiento”. Su propiedad es la de concentrar toda la energía del cuerpo, la mente y el espíritu en un deseo concreto, sea del tipo que sea, ayudando a conseguirlo (un sitio para aparcar, el libro adecuado, la información necesaria, etc.)
Formula en tu interior tu deseo u objetivo con toda claridad. A continuación, une las yemas de los dedos pulgar, índice y medio, y dobla hacia el centro de la mano los dedos anular y meñique.
Abhaya Mudra
Es uno de los mudras más espirituales. Actúa como una oración aliviando nuestros miedos y conflictos internos. El miedo se ve sustituido por la confianza que necesitamos para abordar los problemas a los que nos enfrentamos.
Se realiza con la mano derecha, con la palma de la mano hacia fuera, con los dedos algo separados y sin forzar la mano, doblando ligeramente los dedos como si descansasen de forma natural.
La mano izquierda descansa sobre el muslo izquierdo, en el regazo o junto al corazón.
Ushas Mudra
Dirigido a todo lo relacionado con el segundo chakra. Es decir, las relaciones sociales y las relaciones sexuales. Revitaliza la energía del cuerpo. Puedes utilizarlo si te encuentras sin fuerzas, para hablar en público o para mantener alguna relación social que te provoque estrés o apatía.
Tienes que cruzar los dedos de una mano con los de la otra, de forma que un pulgar quede sobre el otro.
Práctica de meditación utilizando la energía de los dedos
Otra manera de canalizar la energía vital es realizar una meditación con la energía de los dedos.
Sólo tienes que ir rodeando cada uno de los dedos, con los dedos de la mano contraria. Pon toda tu atención en cada dedo, y en las sensaciones que vayan apareciendo en tu cuerpo.
En las manos, y en los pies, están reflejadas todas las zonas del cuerpo. Por ello, las diferentes posiciones de los dedos ayudan a desbloquear aquellos puntos que se encuentran en desequilibrio:
- Dedo pulgar: Representa el elemento fuego y el meridiano pulmón. Su cometido energético es equilibrar las energías del cuerpo, aportando energía cuando hace falta y absorbiendo el exceso cuando debe eliminarse.
- Dedo índice: Representa al elemento aire y se relaciona con el chakra de la garganta, el estómago y el intestino grueso. Energéticamente nos provee de la capacidad de crear y de pensar.
- Dedo medio: Representa al elemento éter, y el meridiano implicado en la energía de este dedo es el meridiano de la circulación. Se relaciona con el chakra del corazón. Tiene como cometido proveernos de la energía necesaria para aprovechar y superar los retos de la vida.
- Dedo anular: Representa al elemento tierra y el meridiano del hígado. Su energía nos proporciona la fuerza necesaria para defendernos y luchar por lo que es nuestro. También aporta equilibrio interior para afrontar cualquier situación. Se corresponde con el primer chakra.
- Dedo meñique: Representa al elemento agua y nos facilita la posibilidad de relacionarnos socialmente. Se encarga de trabajar nuestras emociones. Tiene asignado el segundo chakra.