Mindfulness es la práctica de la atención plena o atención consciente, sostenida en el momento presente (“el aquí y el ahora”). Es sobre todo, estar presentes. Por eso, practicar Mindfulness es vivir con un estado de conciencia desde el que se atiende todo lo que sucede en cada instante. Tanto fuera como dentro de nosotros, sin juicios, críticas o valoraciones.
«La vida sólo se despliega en momentos. Si durante la mayoría de estos momentos no estamos plenamente presentes, es posible no sólo que nos perdamos aquello que es más valioso de nuestra vida, sino también que no nos percatemos de la riqueza y la profundidad de nuestras posibilidades de crecimiento y transformación«
Jon Kabat-Zinn
(Creador de Mindfulness)
Se ha comprobado que la práctica regular de Mindfulness disminuye significativamente el estrés y la ansiedad, así como la sintomatología asociada. Así, Mindfulness nos permite salir del modo “piloto automático” en el que vivimos habitualmente, para empezar a vivir de un modo más consciente.
Qué es estar presentes
Estar presentes significa vivir «el aquí y el ahora» Es decir, mantener una actitud de atención plena, lo que implica,
prestar atención de forma consciente, en el momento presente y sin juzgar
Por eso, la práctica de Mindfulness, nos abre a la posibilidad de vivir la vida en el momento presente, estar aquí y ahora, “ser presencia”. Y esto es precisamente lo que nosotros podemos llevar a cada momento de nuestra vida cotidiana. Porque Mindfulness también es fregar los platos, conducir, jugar, vestirse, comer, pasear, leer…
¿Cómo integrar Mindfulness en tu vida?
Lo más complicado es siempre romper con nuestros hábitos. De ahí que la clave esté en incorporarlo poco a poco, sin imposición. De esta manera, puedes conseguir integrarlo en tu día a día. Y finalmente, convertirlo en tu forma de vida.
Algunos consejos sencillos para incorporar Mindfulness en tu día a día
1-Respira tu emoción
Cuando detectes una emoción que surge en tu interior, para un momento y préstale atención.
¿Dónde la sientes, en la garganta, en el pecho, en el estómago,…?
Permanece conectado a esa sensación, y «respírala» unos instantes, en vez de evitarla,… y observa qué sucede.
2-Haz 3 pausas Mindfulness
Solemos vivir siempre con prisas, y esta tensión puede provocarnos desequilibrios.
Durante el día, haz 3 pausas Mindfulness, poniendo la atención en tu abdomen. Observa cómo con la respiración tu tripa sube y baja, como la de un bebé cuando respira relajadamente.
3-Observa tu postura
Hazte consciente de tu postura. Pon la atención en cómo están tus manos, tu cara, tu espalda,…
Observa las sensaciones asociadas a la postura que estás adoptando en este momento.
4-Escucha desde el corazón
Pon tu atención en escuchar a otras personas desde el corazón. Atiende a sus palabras, sus gestos y los sentimientos o emociones que hay detrás de ellos.
Cuando una persona siente que está siendo escuchada, algo se libera en ella, y de algún modo se produce una sanación.
¿Qué tal si empiezas hoy mismo a tomar conciencia de cada instante de tu vida?
El mejor lugar para ello es aquí
El mejor momento para ello es ahora
Yolanda Peralta
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